Se ve la punta del iceberg en salud

El gran reto para 2022 seguirá siendo el tema de salud, en el que ni la UNOPS, al mando de Grete Faremo, podrá salvar a México.

Es claro que la UNOPS se metió a una operación más compleja que adquirir los medicamentos para Guatemala u Honduras, el mercado mexicano es enormemente más grande y complejo.

Pero cuando abordas el mercado con un proceso nuevo, se debe pecar de tener mucha planeación y transparencia de los pasos, trámites y criterios.

El proceso de la UNOPS tuvo más de 10 enmiendas en el transcurso del proceso, ni siquiera ellos tenían aterrizadas las reglas, tuvieron que ir modificando en el camino, lo que ocasionó incertidumbre.

Y cuando vimos que más del 90%, de lo poco que se adquirió, fue de laboratorios establecidos o con representación en México, naturalmente uno se pregunta: ¿Ese menos del 10% que se compró en otros lados hizo la diferencia en costos y en calidad? La respuesta es que no.

Porque no se consideró la distribución, todo ha redundado en un actuar que agregó costo, pero no eficiencia.

Y en la parte de operación de logística, era un tema ya resuelto, pero se siguen buscando nuevas estrategias, sin que se haya quedado en algo. Sólo se ha complicado y encarecido sin llegar a nada.

En cuanto al Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), al mando de Juan Antonio Ferrer, le hace falta directriz y la experiencia debida para estructurar procesos eficientes, bien planeados, a fin de poder echarlo a funcionar. Por lo pronto, se afecta a los más necesitados.

Parece que no hay solución o una estrategia para resolver los problemas en materia de salud, si bien es cierto que no era lo mejor antes de esta administración, sí había cosas que marchaban bien, y, claro, áreas de oportunidad.

Sin embargo, en esta administración la estrategia a seguir ha desestabilizado lo que ya se tenía avanzado y lo que requería atención, de ahí que el 2022 está lejos de ser alentador en materia de salud, ya sea para atender el Covid o dar servicios médicos y medicamentos del sector público.

Hay corrupción, pero no ha prosperado ninguna denuncia. Esto constata que hacer las cosas sin un plan B es lo peor.

Procesos repentinos, asignaciones directas por doquier, que no resuelven el desabasto y que encarecieron la compra en términos netos.

En cuanto al tema del Covid, ¿se pudo aprender y está México preparado rumbo al 2022?

Aunque ya hay un avance en vacunación, se pudieron haber logrado mejores resultados, involucrando a toda la sociedad y al sector empresarial. No sólo al gobierno, que tiene una visión más electoral.

El 2022 está en puerta. México ya aprendió y está preparado. Tristemente, creo que no se van a ver grandes ni notorios cambios en estrategia, se va a seguir queriendo tener el monopolio de la vacuna.

Desafortunadamente, se irá posponiendo la vacunación de refuerzo. Las cosas no van a cambiar hasta que el sector privado intervenga, canalizando vacunas por medio de las redes de distribución ya autorizadas, y esto no va a suceder hasta que en Estados Unidos la FDA dé registro sanitario permanente a las vacunas que tenemos en México.

Y así se terminen de cubrir los compromisos que tienen los países desarrollados con los subdesarrollados en materia de vacunación.

Estamos viendo la punta del iceberg. Hoy siguen siendo Covid y urgencias la prioridad.